A veces, lo que parece no es la realidad. Uno puede pensar en que solicitando una hipoteca, tenemos un gasto adicional o nos comprometemos a pagar una cuota del prestamo durante una decada o más aun. Pero a veces, solicitar una Hipoteca implica un ahorro importante de dinero, sobre todo para aquellos que alquilan un piso o una casa, muchas veces pagando ademas del alquiler, expensas y gastos muy onerosos.
Mas alla del ahorro que mencionamos, lo cierto es que muy pocas personas pueden acceder al techo propio o a comprarse una casa con todo el dinero en efectivo, cash. Por eso, en la mayoria de los casos la unica forma de cumplir nuestro sueño es, simplemente, solicitando un préstamo hipotecario a largo plazo.
Comprar una vivienda es hacer realidad un sueño que debe construir a la medida de sus necesidades y posibilidades, por lo que muchos bancos, como el Banco Sabadell, le ofrecen financiación a su medida.
Entre los servicios que le ofrecen estan el asesoramiento personalizado y la posibilidad de elegir entre distintas modalidades de hipotecas. En general, existen dos clases distintas de hipotecas, dependiendo de la forma de cálculo del interes: a tipo fijo o a tipo variable. Las condiciones de cada una de ellas se las detallamos a continuacion:
Hipotecas a Tipo Fijo:
- Plazo de amortización: hasta 30 años
- Máximo financiado: hasta el 80% sobre el menor valor entre compra venta y tasación
- Cuota constante durante toda la vida de la hipoteca
- Requisito: tener como máximo 75 años al vencimiento de la hipoteca, contratar seguro del hogar y seguro de vida
Hipotecas a Tipo Variable
- Máximo financiado: hasta el 80% sobre el menor valor entre compra venta y tasación para primera residencia y hasta el 70% para la segunda residencia
- Plazo de amortización: hasta 40 años
- Interes menor que el de tipo fijo pero variable a lo largo de los años.
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